La importancia de una coma

Un blog freak, salvaje y sentimental

27.8.06

Tiempo

El verano comienza a agonizar. Y no es que me alegre pero no puedo negar que me ilusiona que empiece el otoño. Me gusta eso de ponerme una chaqueta para salir a la calle. Me siento protegida. Me siento segura.
[Y no, esto no es un anuncio de compresas.]

En breve estaremos metidos de lleno en la actividad estresante de volver al trabajo, a las clases, a todas ese estrés que a veces parece dar sentido a nuestras vidas y justifica nuestra existencia en esta pelotita que gira alrededor del sol.
[Ahora que hay un planeta menos podemos hasta sentirnos más especiales por estar aquí.]

Ahora tocará achacar a la falta de tiempo el no poder quedar con nuestros amigos, el no poder ver a nuestra familia, el no poder dedicar ni un solo minuto a ese hobby que tanto nos gusta. Iremos escopetados a todas partes, peleándonos con la gente en el metro por un asiento libre. Nos exasperaremos metidos en un atasco mientras oímos el sonido de los cláxones de los coches de alrededor. Volveremos a llegar tarde y volveremos a poner excusas por llegar tarde.
[Aunque algunas no dejan de hacerlo ni en verano…juas.]

Los ladrones de siempre nos volverán a robar el tiempo. El trabajo, las clases, el gimnasio, la ONG que cogemos con ganas en esta época pensando que podemos regalar un poco de eso que tanto nos falta, las tareas de la casa, los hijos, los padres, los hermanos y demás familiares que requerirán nuestra presencia y nuestra ayuda, el perrito que nos espera en casa y menea el rabo con alegría ante la perspectiva de bajar por fin a la calle tras un largo día sin poder hacer sus necesidades.
[O tras haberlas hecho en el rincón que menos nos lo esperamos.]

Tiempo que queremos y no tenemos. Tiempo que gastamos y no podemos recuperar. Tiempo para vivir. Tiempo para movernos. Tiempo para ser felices y compartir nuestra felicidad con los que queremos. Tal vez fuera cierto lo que decía Lennon de que la vida es lo que te ocurre mientras estás ocupado haciendo otros planes.
[Dejaré de hacer planes entonces. Y viviré.]


16.8.06

raro raro

nos encontramos inmersos en una semana rara. es la típica semana en la que uno de los días es fiesta y los siete días se descabalgan del caballo laboral. hoy es miércoles, pero como si fuera lunes.

ante este fenómeno te sientes rara, bueno quien trabaje (pq yo ahora no). pero quien lo hace le gustaría cambiar ese día de fiesta q fue, y ponerlo en viernes, para enlazar con el weekend y, así, hacer un acueducto (no un reducto).

para los q no estaban de vacaciones, esta semana ha sido como un coitus interruptus en el q te ponen la miel en los labios un día y al siguiente tienes q recomenzar de nuevo, como si no hubiese pasado nada pq, en realidad, el día en el q no se ha ido a la oficina sirve para bien poco, excepto para planchar y ordenar la casa.

eso si, los hay q vienen de solazarse en la playa, la montaña o el pueblo de los ancestros y se encuentran igualmente descabalados, aunque ellos si q notan el día menos. son los días de abrocharse el cinturón, aunque sea difícil por el par de kilos recolectados en paellas y mariscos, y pasar mirando de soslayo el corte inglés pq ya no queda pasta q pulir.

los incendios ya no arrasan galicia. debe ser q la lluvia hace q los incendiarios, vaya usted a saber el motivo, por muchas colillas q echen, muchas ramas q quemen o mucha mala leche con la que fumiguen de fuego todo lo verde q encuentren, ya no pueden conseguir su objetivo. la naturaleza está llorando pq ya no podía más....

feliz "comienzo" de semana

8.8.06

E-woks, momentos frikis y otras hierbas...

En vista de que La importancia de una coma se ha convertido en el blog de las crónicas, tras una apasionada reunión vía Messenger y matizaciones a través de e-mail, procedo a colgar lo que aconteció el sábado por la noche muy cerquita de la sede del partido del aguilucho... esto, digo... de la gaviota.
[Y es que a una, aunque quiera, no le dejan quitarse la etiqueta de escritora ni en sus ratos de ocio. Ainsss...]

Sí, nosotras cuatro éramos esas del final de la mesa que no podíamos parar de reír y decir veinticuatro gilipolleces por segundo (como los fotogramas de las pelis). De hecho, yo era la que no paraba de pedir una cerveza que tardó lo suyo en llegar.
[La china camarera me debió ver cara de borra-china.]

Así que por aquí iremos desfilando las cuatro y desgranando los momentos frikis que hemos logrado recordar. Sabemos que han pasado ya unos días pero el calor es lo que tiene, nuestras neuronas han tardado en recuperarse...
[Y pensad que, de por sí, tampoco andamos sobradas de ellas...]

Momentos frikis de una noche de verano en una mesa con 14 lesbianas que tienen un blog en el que airean sus cosas más íntimas… Si eso ya de por sí no es lo suficientemente friki… En fin:
- Oye Club, cómo se llama Lur?? Porque ese es un nick no?
- No, no. No es un nick
(así con cara de malota, porque ella se sigue haciendo la durita)
- No jodas, pues te arriesgas a que te reconozcan en Zaragoza cuando la pasees.

[Jo, pues mi perro sí que tiene nick...]

Descubrí que la élite de la blogosfera abrió el blog para ligar… La élite y alguna de la no élite… Frase de la noche: a ver, seamos sinceras, que aquí nadie ha abierto el blog como terapia. Eso es una excusa y todas lo sabemos. Lo que buscábamos era pillar. Comorrrr????? ;-)

[Si a ligar llamamos a tener que lidiar con calientabollos varios... Vale, yo también me lo abrí para ligar.]

Y también vi que algunas de las historias que leemos son provocadas… Friki total.
Bueno, es que en realidad yo quería escribir que Fulanita sabía tal cosa así que fui a Fulanita y le conté esa cosa para así poder escribir que Fulanita sabía esa cosa. Si tenemos en cuenta que Fulanita es la madre de una bloguera y que la cosa es contarle que tiene novia… En fin, que solo le contó que tenía novia para poder así escribir en el blog que le ha dicho a su madre que tiene novia… Eso es vivir por y para el blog, sí señores!

Debieron suceder mil cosas más, pero yo andaba comiendo mi wok-plato que estaba de muerte por cierto...

[El mío también, qué conste]

como en su momento fue llamado el grupo en el cual michel, butragueño, sanchís y cía hacían q el madrid fuese galáctico en triunfos (no en metrosexuales o superfichajes que no hacen nada), el grupo que nos reunimos el sábado en plena callé génova, y pasándosenos por la cabeza hacer una besada justo al lado de la sede de cierto partido que nos odia un poco, podría llamarse "la quinta del wok".

[Ein?]

yo era virgen de woks (sólo había visto algún ewok en el cine, pero nada más) y, como la comida asiática me sienta un poco como el culo, iba con reticencias (no por las blogueras, sino por la comida). finalmente pedí un 27, sin picante ("nunca"), al q eché tanta salsa de soja y sal que parecían q realmente el plato tenía picante, en fin...


[¿Te he dicho que tengo un wok en casa aún sin estrenar? ¿Y mucha salsa de soja? Cuando quieras hacemos una cenita...]

vistos los amores conocidos, reconocidos y secretos, he llegado a la conclusión de q quiero llevar las arras de alguna pareja bloguera (tal y como hicieron en la boda de nuestra leti, felipe juan froilán de todos los santos, victoria federica y sus primos urdangarines, q tienen nombres menos largos).

[¡Ay, madre! ¡La de veces que me tuve que morder la lengua! ¡La de veces que tuve que callarme! ¡Juas! ¡Juas!]

Llegamos a la puerta del Escape,
el portero que nos quiere cobrar entrada... Insistimos en entrar gratis: Pero si nosotras solas llenamos el local! Nada. La bloguera más vacilona suelta de repente: Tú es que no sabes quienes somos. Desde atrás apoyan: Si gritas el nick de alguna, en un momento tienes a 200 más esperando para entrar... Venga hombre... Pues nada, a otro sitio.

[Y como nos daba igual a dónde ir pues nos fuimos al Medaigual... Si es que la cosa es ser coherentes...]

Descubrimos que la laca friki va impresa en kleenex, es igual de inflamable que la normal, pero no fija nada los peinados...

Comprobamos que la ñoñez da sueño. O es que gastan toda su energía en otros menesteres, mejor no pensarlo...

[La no-ñoñez también da sueño, que yo me andaba durmiendo por las esquinas...]

Y por último, el cántico más repetido de la noche: Poyeya de la artista revelación de la temporada Soyaya. Lo reconozco, yo también la canté...
Un frikibesazo


¿Y yo ahora qué digo? ¿Qué puedo añadir? Después de una agitada semana (cena de celebración un día, musical al siguiente, monólogos al otro) la cena fue el evento estrella de la semana. Me reí mogollón con todas las ocurrencias de las presentes y con las habituales tonterías de mis niñas (y las mías, claro, que tonterías tengo para dar y tomar). Sudé como un pollito en el asador dentro del bar. Sita, Sinfo y yo tuvimos momento sandwich bailando. Que, ya en mi casa, Lince Miope y yo tuvimos momento exaltación de la amistad (aunque no estábamos borrachas y... ¡no es lo que pensáis, morbosas!). Al día siguiente dormí hasta por la tarde. Entonces encendí el ordenador y me puse a escuchar el disco de la omnipresente Lily Allen (la canción que tenéis ahora en el reproductor de la página) que resultó ser la banda sonora del fin de semana. Así que ahora sólo queda esperar la próxima...
[Por cierto, Club, ¿sigo siendo jurado del concurso Miss Blogonovia? Prometo ser.... ¡ejem! imparcial a cambio de una módica cantidad...]